viernes, 20 de septiembre de 2013

Cuestión de energías

Ayer mi hermana me contaba de una chica  ahora compañera de ella de trabajo, anteriormente conocida mía, que anduvo saliendo con un compañero de trabajo de ella, que en algún momento me quiso presentar a mi pero terminó cancelando porque según ella es un histérico.
A él le gustaba ella bastante pero empezaron a salir un par de veces y se dio cuenta que no le gustaba más porque tiene poca energía...
y me pegó eso que me dijo mi hna, porque me sentí identificada con eso, siento que mi energía es muy parecida a la de ella. No considero tener baja energía, sino ser muy tranquila, que son cosas distintas.
No me gustaría que un chico deje de salir conmigo porque tengo poca energía. Ahora qué será poca energía para ellos? Si de energía se trata, yo tengo para rato, porque soy de hacer cosas todos los dias, de salir, de hacer cursos, de leer, estudiar, escuchar música, trabajar, etc. Cuando se trata de estar en grupo, socializar, ahi soy la que en gral menos habla y menos se mueve, por lo tanto en ese contexto podrian verme  con poca energía, en esos momentos si, yo no soy una persona enérgica, movediza, inquieta, todo lo contrario.
Me puse a pensar entonces en antiguos ex, habrá sido por eso que nos dejamos de ver? porque necesitan ver más acción? Me acordé de uno en particular con el que tuve algo, pero por cuestiones de distancia nunca pasó más, pero recuerdo que cuando me conoció en algún momento de la salida es como que incitaba a que dijera algo, me moviera, hiciera un chiste, algo...necesitaba que yo fuera alguien que no soy.
Entonces sigo pensando y creo que las mujeres somos energía, somos movimiento, y en eso nos diferenciamos de los hombres entre otras cosas, y eso ellos lo ven atractivo de nosotras, que se supone que hablamos más, que bailamos, que nos movemos y eso les gusta, cuando no ven eso, no les atrae la mujer...
será tan así? igual sigo creyendo que hay un roto para un descosido, hay alguien para cada uno de nosotros.
tendria que dejar de pensar o de buscar qué es lo que tengo que no gusta...y resaltar y mostrar las que si podrian gustar, no?o debería tratar de ser alguien que no soy?


lunes, 2 de septiembre de 2013

Se me rompió el ♥ en pedacitos

Cuando lo vi a mi vecino en la cuadra de mi edificio con su noviecita............
Ya fue vecino, ahora me queda seguir admirando a mi compañero de clase que es un churro, ya decidí que tengo que hablarle. Y ayer me atendió uno en Farmacity que yo ya lo tenía visto, ni me miró, no importa, yo si tengo para mirar..

Salidas nocturnas

Tuve un par de salidas esta última semana y lo que rescato es que estuve moviéndome un poco más que de costumbre. Cuando fuimos a un bar en el medio de la semana, fui yo la que voluntariamente me levantaba a buscar bebida que repartían gratis, era yo la que iba a buscar comida, que también repartían gratis.....
No así tanto en la segunda salida, que fue más fiesta bailongo, pero me bailé bastante... esperando que algún hombre se acerque, pero hola? dónde están?
Y aquí volviendo a pensar que tengo que ser yo la que da señales, estuve mirando  a uno pero o no me vio o no quiso.

Repensando

Mi amiga hippie me dijo algo interesante el otro día:
Que mientras estemos todo el tiempo haciendo cosas, buscando estímulos, no estamos pudiendo ver qué queremos hacer, no estamos pudiendo recibir.
Me lo ejemplificaba con su caso, ella este año empezó a trabajar menos horas teniendo la tarde libre para estar consigo misma, para decidir qué quería hacer y qué no. Así decidió dejar algunas cosas y sumar otras como bailar por ejemplo. Descubrió que bailar era lo que ella tenía y había querido hacer siempre y por alguna cuestión no hizo. Tomando clases de baile se siente feliz y que está en el camino correcto. Así empezó a ir a eventos, lugares con gente que siente lo mismo que ella, se conecta con personas que la ven como bailarina, se encuentra con gente que está vibrando lo mismo y la ven y la abrazan como una más, eso era lo que a ella le faltaba años anteriores, y está recibiendo mucho amor.
Entonces me veo a mi haciendo mil cosas, facultad, yoga, cursos, salidas, trabajo todo el día, etc.
Por un lado pienso, estoy haciendo todo lo que quiero hacer en este momento, no quiero dejar nada de lo que estoy haciendo, hoy no es el momento.
Por otro lado pienso, estoy muy a full y eso no me hace del todo bien, quisiera tener más tiempo libre, quisiera permitirme descansar más, estoy teniendo dolores de cabeza los fines de semana y no sé por qué, estoy queriendo hacer ejercicio pero no me tomo el tiempo, estoy queriendo dedicarle tiempo a otras cosas como proyectos personales para algún día vivir de eso, pero no me están dando los tiempos, trabajando todo el día no dan. Estoy en busca de un nuevo trabajo por menos horas, no se está dando...
Creo que en mi caso no es el momento todavía, quiero terminar por lo menos un año más de facultad, por lo menos hasta fin de año o marzo seguir con el curso que estoy haciendo y con yoga seguro porque me hace muy bien.
Si comparo mi situación con la de ella, las dos estamos haciendo lo que nos gusta y lo queremos hacer, cuál es la diferencia? Es que las cosas que ella hace no requieren de un tiempo de dedicación extra como en mi caso que tengo tarea que hacer. Ella trabaja la mitad del día, tiene tiempo libre para hacer sus cosas. No está estudiando algo que requiere que lea o estudie.
El llenarse de actividades como por ejemplo estudiar y formarse hace que uno esté todo el tiempo usando la cabeza en eso, invirtiendo tiempo, no es lo mismo leer un libro por placer, me tomo mi tiempo, lo termino y listo, que leerlo una vez, dos veces, hacer un resumen y estudiar.
Con respecto a no recibir en realidad se refiere a que por ejemplo si vamos a ver una obra de teatro o un grupo de música y seguido nos vamos a tomar alcohol para dispersarnos, en realidad lo que estamos haciendo según mi amiga es tapar con otra cosa lo anterior, de alguna manera seria como borrarlo, buscamos otro estímulo..entonces lo ideal sería irnos a nuestras casas tranquilos, pensando en eso que fuimos a ver, dejando que esa experiencia nos siga llegando adentro, todo lo que sea visual y/o sonoro nos queda resonando, seguimos pensando en eso y repensando como después de ver una película.
En cambio si nos vamos a hacer otra cosa, no estaríamos dandole el tiempo necesario para terminar de procesarlo.